A la luz del análisis de la densidad y trascendencia de los cambios e innovaciones que desde finales del siglo pasado y los que se han venido dando en estas dos primeras décadas del tercer milenio, en todo ámbito del quehacer humano, resulta para nosotros inexorable, condecirnos con algunos analistas, en que al menos tendencialmente hablando, los próximos veinte años, serán los veinte años ‘más interesantes’ en la historia de la humanidad. Los diferentes, drásticos, muy rápidos cambios y su efecto correlacionado con el crecimiento subsecuente /, nos enfrenta a situaciones nuevas y singulares; y ello exige, determinados grados proporcionales de transformación / adecuación estratégica, en todas las entidades de hoy en día.